Antes de empezar, debo confesar que tengo una cuenta pendiente con Bianquetti, pues no he llegado a leer «La tragedia de los girasoles». Así que me atrevo a hablaros de este nuevo personaje que se ha sacado de la manga mi paisano gaditano, Benito Olmo.
En este caso, hablamos de Mascarell, un detective muy particular y por supuesto, con las características necesarias para ser un imprescindible en las novelas de este género negro.
Benito nos lleva al lugar en el que hoy en día reside, Frankfurt. Nos enseña de forma exhaustiva y con ese halo especial el Barrio Rojo de la ciudad, las narco salas y algunos tuburios desconcertantes. La zona «perdida» donde las malas almas se encuentran por culpa de sus elecciones en la vida. Y aquí es donde aparece la otra cara de la moneda de esta historia, Ayla. Una joven de carácter fuerte que se cruzará sin remedio con el detective por culpa de un trabajo por el que es contratado. Ambos buscan a la misma persona a través de las calles alemanas donde el escritor nos sumerge con la facilidad y habilidad de su escritura, salpicando de detalles los escenarios. Sin olvidar los detalles esenciales que necesitan los personajes para mostrarnos todas sus miserias, sueños y esperanzas en una ciudad que no da tregua.
Si a todo ello le unimos el cóctel molotov que genera en las sombras los poderes absolutos de una de las organizaciones más peligrosas del país y que dan nombre a esta novela, la diversión está asegurada.
Leída en unos diez días. Sin pausa y sin prisa, he disfrutado de todo lo que nos ofrece mi paisano e incluso con un par de giros argumentales de los que tanto disfrutamos cuando leemos e incluso en mi caso, cuando escribo, que me ha sabido como un buen postre para la finalización de un trama muy bien llevada.
Documentación precisa, al hilo de la historia y sin abusar. Un tempo bien marcado y que hace que la lectura fluya sin soporíferos momentos. Destaco el detalle de como ambos personajes se pasan la pelota entre capítulo y capítulo (cortos que ayudan al ritmo de la acción), los de Mascarell en primera persona y los de Ayla en tercera persona.
Benito Olmo consigue removernos las tripas al recordarnos el oscuro y perverso poder que ejercen los ricos contra la gente de a pie a través de algunos personajes repugnantes.
No os pienso contar nada más. Tenéis que complarla y punto.
Enhorabuena, paisano. En nada veremos en la grandes pantallas a tu primer hijo «La maniobra de la tortuga» y eso es para celebrarlo con orgullo gaditano.
Sin duda, hoy me enfrento a un reto y no creo que lo consiga superar. Intentar reseñar lo que para mi es una obra maestra es una odisea. Jamás, en todos mis años de lectura un autor o autora habían hecho que mi corazón se encogiera y necesitara respirar con tanta necesidad por culpa de un mar de lágrimas de emoción. Sí, «Invisible» de Eloy Moreno me ha hecho llorar y sufrir mucho.
Soy padre de una mujercita de 18 años, otra de 4 años y un niño recién nacido. Leer este libro supone un reto lleno en cierto modo de pavor al, no solo ponerse en la piel del protagonista de esta historia, sino al imaginar que tu hijo puede ser parte de ese viaje de terror en el que se ve involucrado este chico.
Todo comienza con un simple NO. En la típica escena en la que el abuson de la clase pone entre la espada y la pared a un joven de un instituto cualquiera, de cualquier ciudad o país. Aquí la localización es lo de menos, pues esta historia es universal y este libro es, no solo de obligatoria lectura en todos los colegios del mundo, sino en todos los hogares de la madre tierra.
Siempre he defendido a capa y espada que el carácter y lo volares de un niño son cosa de los padres. Sin olvidar, claro está, la guía que debe ofrecer un profesorado durante el viaje que deben hacer los jóvenes hacia el conocimiento.
Hay muchas razones por las que uno puede desear ser invisible, pero ninguna debe ser para desaparecer y no sentir el dolor, el miedo, el acoso y la furia de otro ser que, sobre todo, se siente inferior al ser que ataca. Yo os pueso confesar que he padecido esa sensación y no por mi condición sexual, económica o privilegiada, sinceramente a día de hoy no sé porque fue.
En esta novela sencilla, bañada en sensibilidad y llena de lecciones, te hace ver (en mi caso como padre) la necesidad que tenemos de estar más pendientes de nuestros hijos, pues no me quiero imaginar el hecho de no ver a tiempo los problemas por los que puedan llegar a pasar mis hijos. Y en el caso de los niños, una forma de ver a través de otros ojos, lo que es sentirse tan pequeño e insignificante que quieras desaparecer y no saber en realidad el motivo.
Evidentemente, los personajes de esta novela son increíbles, cada uno en su contexto. Yo, me tomaré la libertad de elegir a uno en especial, la profesora de literatura. Ella y su dragón son una genialidad metafórica del autor que nos hace ver como los golpes enseñan, pero también sirven para ayudar al prójimo. Y por supuesto, me quedo con la relación del protagonista con su hermana pequeña, que se te clava hasta lo más profundo del alma.
No me quiero ni imaginar la satisfacción que ha supuesto para Eloy Moreno los miles de mensajes que ha recibido por parte de niños y niñas con esos problemas escolares, o casos como el mío como padre.
No sé que más os puedo decir para suplicaros, no pediros, que compréis este libro y os obliguéis, tanto a vosotros mismo como a los vuestros a leer esta maravillosa novela, aunque yo la catalogaría como lección de vida.
Por mi parte, darle una y mil millones de gracias al autor por esta… no sé ni como catalogar este libro sin caer en la redundancia, de verdad. No dudéis de que obligaré a mis hijos a leerla. Como le dije por Instagram, aquí tiene a un nuevo seguidor incondicional de sus obras y me haré poco a poco con todas sus obras.
Os dejo mis impresiones a flor de piel también en mi canal de YouTube:
Mi puntuación es de 10 sobre 10 y no me tiembla el pulso.
Es inevitable el acabar un año sin leer nada del rey del terror, julio a sido el mes y en apenas una semana. Todos sabéis mi amor incondicional por el viejo escritor de Maine. El hombre que escribe mas rápido del mundo y que no solo George R. R. Martin se pregunta como teclea y crea tan rápido. A dos o tres libros por año nos tiene ya acostumbrados. Este mismo año se publicará su segunda novela en España (pues ya esta en EEUU) «Billy Summers», allá por el 9 de octubre.
Es verdad que algunos son flojos, pero en esta novela corta de apenas 245 páginas de la que os voy a hablar, King nos demuestra de nuevo su maestría como narrador y como a través de una historia sencilla, nos hace disfrutar como enanos.
Yo quise estirarla, pero fue imposible. Nos metemos de lleno en una especie de diario de un joven de unos veintitantos años que nos cuenta lo que pasó en su juventud y sobre todo el curioso e inquietante poder o don que posee, según se mire: ver a personas muertas, pero no en este caso como el famoso niño de la película de Shyamalan. Aquí, el joven Jamie Conklin interactua con ellos justo en el momento de su muerte o minutos después.
Tras llegar a casa con su madre soltera, se encuentran en el pasillo de los apartamentos a su vecino, taciturno y triste, fumando e inquieto. Su mujer acaba de fallecer en el salón y mientras la madre de Jamie habla con el hombre, el chico conversa tranquilamente con la mujer sin que su marido se percate… así comienza la novela y así nos atrapa King.
Su madre sabe de su «don» desde hacia tiempo, pues el momento de su descubrimiento fue bastante traumático. En este punto, el joven nos deja claro que esta es una historia de terror, durante varias ocasiones. En particular, debo decir que lo es, pero no a un nivel al que nos pueda tener acostumbrados el autor. Eso sí, a mi me pasan estas cosas y me cago. Todo se ve diferente tras unas hojas de papel.
El caso es que la trama se desarrolla con agilidad y nos mete de lleno en una insólita historia a través de la amante de la madre del chico, una inspectora que busca desesperadamente las bombas que un conocido terrorista a dejado por todo un centro comercial, incluso después de muerto. Evidentemente, aquí es donde entra en acción los poderes de Conklin que la policía le pide a espaldas de su madre y todo explota a su alrededor, no precisamente por las bombas.
Jamie solo quiere una vida normal, pero esta agente de la ley la llevará por un mundo bastante turbio del que deberá salir e incluso escapar, pues digamos que el famoso terrorista no se va a cansar de dar por culo.
Ya os digo, King nos lleva en esta historia por donde quiere y con un lenguaje tan natural y cercano, que hay escena en las que no he podido evitar el soltar una carcajada. Su facilidad de palabra hace que por mucho que sigan intentando desprestigiar su trabajo, nadie pueda negar su maestría.
La primera novela que leí del rey del terror fue «El resplandor» y gracias a él, mi vida cambió para siempre. Quizás, el precio de esta novela corta sea desmesurado, pero particularmente vale cada una de sus palabras.
Yo os la recomiendo encarecidamente y apuesto a que no os va a dejar indiferente, como se suele decir. Esta vez no, pues las dos últimas novelas que leí de él me aburrieron un poco, «Bellas durmientes» y «El instituto».
Os dejo el enlace de mi reseña virtual en mi canal de YouTube también:
Ya era hora, todo llega y es que hoy, por fin, os traigo la reseña de una de mis últimas lecturas del mes de junio. Una distopia a la que le tenía muchas ganas y no solo por la historia en sí, sino por conocer como escribe Manuel Amaro Parrado ya quw su obra es muy extensa. Este profesor de matemáticas de Andujar que tengo como amigo de letras en Facebook y que conocí a través de la literatura que pulula por esta red, tiene una varias de libros muy interesantes, que os dejo en este imagen:
«Sombras en la caverna» no es solo una realidad alternativa o quien sabe si paralela a la sociedad en la que hoy en día nos movemos. La isla, es el lugar en el que se sitúa esta historia y cuyo régimen asfixiante nos recuerda en leves trazos a la obra de Orwell, «1984». Este tipo de novelas yo las catalogo también como historias de terror, un terror real, pues partes de ella recuerdan en cierto modo cosas de la vida que nos ha tocado vivir y que tratan por todos los medios de ocultar los que nos gobiernan.
El Adalid es el ser supremo de esta sociedad que puede denominarse en cierto modo como una gigantesca secta, pero con el hándicap de que no todos están de acuerdo con las normas impuestas por este dictador.
«El trabajo no os hace libres»
«Sombras en la caverna» de Manuel Amaro Parrado
Los ejecutores, son una especia de cuerpo especial que trata de mantener el orden autoritario impuesto por el Adalid y aquí aparece en escena el personaje principal, Fauno y su «hermano» de armas Hermes, que van en busca de unos nuevos rebeldes comandados por un personaje que se hace llamar «Madre» y al que intentan dar caza a toda costa. Sobre él se empiezan a cimentar las raíces de una revolución y en una de sus incursiones, Hermes pierde su silbato a manos de un niño llamado Lander.
¿Un silbato? ¿Tan importante es? Mucho, pues este es uno de los miles de detalles que forjan la originalidad de esta historia, junto con cosas como la imposición de unas pastillas a los ejecutores para inhibir sus sentimientos, o por ejemplo, que todas las televisiones del país no tienen mando a distancia y son controladas por el régimen. Podría enumeraros mil cosas más, pero no pienso destripar más de esta magnífica trama hilada por Manuel.
Otro de los personajes importantes para esta historia aparece en escena y es el que cambia la forma de pensar de Fauno, Lora, la hermana del pequeño Lander y no solo por el sufrimiento y los pesares por los que pasa, descritos a la perfección por el autor. Los escenarios son brutales, ya que la Isla se compone de anillos. En los exteriores vive la gente como Lora y Lander, donde Fauno ve toda la miseria que oculta el Adalid a la gente rica de los anillos interiores.
La lucha y conflicto que crecen dentro del alto rango de los ejecutores lo lleva a vivir una aventura descomunal dentro de su corazón.
La novela está repleta de frases reflexivas que se asemejan con terror a la sociedad en la que vivimos y te hacen pensar en muchísimas cosas. Todo ello hace a esta novela una obra de cabecera para todo aquel (como yo) que algún día quieran adentrarse en el mundo de las distopias como contador de historias y por supuesto, una lectura obligada para todo aquel que ame este género tan complicado y original. Crear un mundo de la nada al estilo de las fantasías épicas. no está a la altura de cualquiera.
Como contrapartida, y solo como una pequeña nota negativa al respecto, debo decir que los capítulos a veces son demasiado extensos, sin embargo, no te hacen desconectar para nada de la trama. El lenguaje es directo y muy rico, lleno de matices, pero de fácil comprensión que hacen que se active partes muertas de tu cerebro revolucionario.
En términos generales, una obra muy muy buena y que la he disfrutado en tan solo nueve días. Eso dice mucho al respecto.
Mi más sincera enhorabuena, Manuel Amaro Parrado. «Sombras en la caverna» es una novela que nadie debe perderse. Os dejo el enlace de compra:
Hace unos días os dejé mis impresiones sobre esta tercera entrega de la trilogía de «El cuarto mono» en mi canal de YouTube y creo que pude expresar con palabras lo que ha significado para mí la historia y el viaje de dos personajes únicos: Sam Porter (nuestro querido policía) y su antagonista el Cuarto mono.
Esta última entrega arranca en el hospital donde se está debatiendo entre la vida y la muerte el que fuera cómplice del CM en «La quinta víctima», Upchurch. Para colmo, el centro se encuentra en cuarentena porque entre ambos han liberado el virus SARS y los agentes Clair y Klozowski están contagiados dentro del mismo. Porter está huido y es el principal sospechoso de todas las muertes y Poole, el agente especial de FBI que entró en acción en la segunda parte va tras él y los compañeros de Sam no pueden hacer nada por demostrar su inocencia.
La trama explota en tu cabeza cuando de repente, empiezan a aparecer nuevos cadáveres con el sello del CM no solo en diferentes puntos de la ciudad sino dentro del mismo hospital.
No os quiero desvelar mucho más, porque este libro es una delicia. La capacidad que tiene Barker de llevarnos por donde le da la gana es magistral y con un ritmo de película de acción trepidante y combinado otra vez con los flashback en los que vamos conociendo más de lo que le pasó a Bishop (CM) cuando sus padres murieron y terminó en una especie de orfanato en el que el joven se enamora y pasa por ciertas cosas absolutamente necesarias para la base de la trama de la época actual.
600 páginas que se te pasan volando y en las que yo destacaría de nuevo, que a pesar de pasar meses de haber leido la segunda parte, en pocas páginas me reenganche de nuevo a la historia y fui recordando por todo lo que habían pasado los personajes.
Los giros son descomunales, la forma en la que vives al limite la historia es brutal. Los escenarios absorbentes, como siempre y las recreaciones de los asesinatos tan tétricas y horrorosas como nos tiene acostumbrados Barker.
No sé que más podría destacar de este tercer libro para definitivamente convenceros de que la trilogía de El Cuarto Mono es una obra maestra del thriller actual y que necesito verla en los cines. Bishop y Porter ya forman parte de mi vida y me ha dado muchísima pena despedirme de ellos. Ah, sí, una última cosa, el final es perfecto y digno de un viaje que nos ha tenido a todos con el alma en vilo.
Chicos/as, tenéis que haceros con esta trilogía, sí o sí.
Aunque no lo creáis después de leer esta reseña, va a ser la primera vez que me va a resultar duro reseñar este libro. Principalmente porque me considero un lerdo simplemente por el hecho de no haberlo entendido. «Casa de hojas» está catalogada como una novela experimental de terror. Lo siento, para mí es un absoluto coñazo y un despropósito sin sentido. Intentaré explicarme.
No puedo con los anexos o notas del autor, a pesar de que en «Caballo de troya» hay miles, en ningún momento me sacan de la historia. No voy a negar la originalidad del autor americano, pero sinceramente, le doy más valor al curro que se han tenido que dar los editores de esta novela que al trabajo del autor.
Este libro arranca a través de un joven que trabaja en una tienda de tatuajes y que comparte piso con una amigo. Ambos se enteran del fallecimiento de uno de sus vecinos, un viejo muy agradable. No sé como, no os lo voy a negar, llegan a hacerse con un manuscrito que tiene en su casa y que se basa en el estudio de un documental hecho por un fotógrafo conocido. La trama va viajando entre esta historia que va leyendo el joven que lo imbuye totalmente y su vida. Vida que no interesa y no aporta nada porque simplemente se basa en sus experiencias amorosas con otras mujeres y que son contadas por el autor en esas notas del autor que te sacan de la verdadera e interesante historia que nos lleva a una casa. El fotógrafo, al igual que Jack Torrance en la famosa novela de King, «El resplandor», decide cambiar de aires y trasladarse con su familia, en este caso, a una nueva vivienda, no a un hotel en medio de la nada por sus problemas matrimoniales. La particularidad de la casa es que de repente, tras empezar unas obras en ellas y grabarlas, se dan cuenta de que la casa mide en un principio 6 mm más que el exterior de la misma, algo incomprensible. Mucho más cuando poco a poco, empiezan a aparecer pasillos, habitaciones y una escalera de caracol que no parece acabar nunca.
Sumemos a esto, la llegada del hermano gemelo del fotógrafo con el que no se lleva muy bien, los problemas de pareja por los cuernos que su mujer le puso en su día y la llegada finalmente de un grupo de investigadores paranormales para saber que demonios está pasando en esa casa.
No niego que la novela es inmersiva y consigue con su edición en ciertas partes meterte de lleno en los sentimientos y sensaciones de los protagonistas. Páginas donde salen solo una palabra, frases escritas en las esquinas de las páginas, incluso al revés o para rematar, partes que tienes que leer frente a un espejo. Superoriginal, llegando incluso a incluir texto tachados por el viejo que escribió el manuscrito. Pero hay partes donde te sales por completo de la trama con apuntes, anotaciones que no aportan absolutamente nada y te descolocan demasiado.
¿Terror? Sí, pero descafeinado por culpa de lo que os acabo de explicar. Quizás, si solo me hubiera limitado a leer la historia de la familia y la casa hubiera disfrutado más el libro. Para colmo, esta que era la parte mas interesante acaba a 200 páginas del final del libro, cuya continuación es una sucesión primero de poemas, imágenes de los eventos, notas de la madre de uno de los personajes que no te dicen nada y un final cerrado de una manera precipitada y sin nada de emoción. No sé, de verdad, no se que más deciros para que no se os ocurra el leerla… ah, sí, que el puto libro para colmo cuesta 30 euros. Que realmente los pagas por lo que os he dicho antes, la currada que lleva por parte de los pobres editores.
No puedo seguir con esta reseña, me entran los mil demonios al pensar que he perdido casi dos meses en leerlo.
Os dejo por aquí mi reseña en mi canal de YouTube para que veáis lo que sentí en mis propias carnes al leerlo.
Mi puntuación es de un 4 sobre 10, excluyendo el trabajo de edición que es de un 10 para mí por todo lo que os he comentado. Esta novela se publicó en el 2000 en EEUU y no ha llegado a España hasta el 2016…lo entiendo perfectamente.
Sinceramente, no sé si este género existe, pero después de leer este libro debe ser obligatoria su creación. Akanni, de Jared Ngale yo la catálogo como novela de denuncia social. Después de su primer éxito «Black experience sex» editado también por Létrame, la autora arriesga con un libro lleno de rabia, verdad y realidad.
Entremos de lleno en materia y sin introducciones. Empezamos por un personaje muy especial, una reportera que vive en España y decide viajar a su país de origen en el continente africano, país ficticio que se asemeja mucho a uno que todos conocemos. En él se reencuentra, o más bien conoce al rey de una aldea en la que vivieron sus antepasados y a través de su interacción, experimentamos el horror por el que han pasado bajo el yugo del dictador que asola su tierra y que en cierto modo es respaldado por los miembros de la comunidad económica europea que tratan, como por desgracia todos ya sabemos, a África como su supermercado.
El lenguaje en esta obra es sencillo y bien estructurado dentro del marco político. Se nota la documentación y el como la autora sabe de lo que habla por haberlo sufrido en sus propias carnes. Sin tapujos, llano, claro y sin tiritas, directo a ese callo que más de uno se ha hecho para olvidar lo que pasa en nuestro continente vecino.
En este viaje, esta chica conoce a la persona que da nombre a este libro, Akanni, la nieta del rey de esta aldea. Una joven fuerte, con ideales y un nivel cultural envidiable para hacer frente al viejo continente, que ese el propósito de su abuelo. Que la joven abandone su país y se forje un futuro allá donde él no pudo. Ella quiere ser escritora y a pesar de las dificultades y empezar con un blog, poco a poco lucha por su sueño.
No voy a desvelar ciertas sorpresas que pasan durante la historia y que para mi gusto (cosa que hablé con la autora) se deberían haber contado de otra manera y en otras circunstancias. El caso es que Akanni consigue llegar a España y allí nada es de color de rosa, entre sus experiencias personales con un chico algo extraño y la creación de su novela, y su personaje principal que se convierte en cierto modo en el tercer protagonista de esta historia y la cual utiliza la autora para de nuevo dar cera, y con razón, a todas la injusticias por las que pasan los inmigrantes en esta piel de toro cada vez más corrupta y llena de seres llamados políticos que son simplemente mercenarios de todo aquel que maneja el dinero.
Hay partes de esta novela que son muy, muy duras. La crudeza sirve para darte una bofetada de realidad y olvidar el hecho de que la esclavitud desapareció hace años. Sigue encubierta de alguna manera y nadie debe pasar por ello en ningún rincón del mundo. La característica principal por la que somos humanos es porque todos debemos ser libres. Libres para elegir nuestra vida, nuestro destino, nuestra orientación sexual, nuestros ideales pero todo en el marco de la comprensión, la tolerancia y respeto hacia los demás, sean de la raza que sean.
Y ahora, debo ser honesto con la autora y especificarle algunas cosas que se pueden mejorar, pues todo lo hablado anteriormente está aprobado con nota. Una historia no es solo lo que se cuenta, sus cimientos se forjan alrededor de unos personajes y ellos deben crecer junto a lo que se está contando, explorar más dentro de ellos y sacarlos para que el lector empatice mucho más con la trama y los sentimientos, en este caso de denuncia, que se exponen en este libro. No radicalizar o seccionar ciertos aspectos de la historia de una manera brusca y tratar de dejar, a pesar de ser una novela diferente, ciertas intrigas o desafíos para que el lector no desconecte de la historia y sienta que simplemente esta leyendo un manifiesto.
Por último, cuidar el lenguaje y rodearte de personas que realmente te lo corrijan bien y te ayuden a crecer como escritora y así aprender no solo a saber conjugar bien los verbos, sino a no repetir muchas palabras en las mismas estrofas que tanto hacemos los autores (entre los que me incluyo). Es curioso este dato, pues lo vemos con mayor facilidad en escritos ajenos que en los nuestros. Es un aprendizaje constante.
En definitiva, Akanni es una historia escrita con el corazón, un corazón que se nota que la autora no ha podido parar o controlar durante el proceso de su creación por todo lo que ha vivido en nuestro país e incluso alrededor de los suyos, sus compatriotas.
Yo personalmente me quedo con la verdad y las enseñanzas que nos deja esta denuncia social y humana sobre un continente que está harto de que lo mangoneen y no se le de el sitio que merecen, por derecho, cultura y riquezas. Me toca muchísimo los cojones eso de Tercer mundo, eso no existe, eso lo han creado los ladrones y chorizos que viven a cuerpo de rey tras un escritorio o tumbados en las hamacas de su putos chalets podridos de dinero y manchados con la sangre de gente buena e inocente. ¡¡BASTA YA!!
Enhorabuena, Jared Ngale por tu valentía, tu dedicación y tu compromiso no solo con tu pueblo, sino con la verdad y la humanidad. Os recomiendo su lectura.
Mi puntuación es de 6’5 sobre 10.
Os dejo también el enlace de mi canal de YouTube donde reseño de otra forma esta novela y el de compra para poder adquirirla:
No os lo voy a negar. No me acordaba en absoluto de que iba esta novela cuando iba a empezar a reseñarla. He tenido que consultar por internet, pero a valido un solo vistazo para recordar esta buena novela.
Debo confesar que para mí, es quizás la más floja de toda esta especie de saga que digamos se ha creado alrededor de el «Señor White», mas que de la propia Antonia Scott. En esta historia, nos metemos en la piel de Simon Sax, un joven con una inteligencia fuera de lo normal y que está a punto de vender un algoritmo a una importante multinacional. En contrapartida a sus grandes dotes profesionales, está su casi nula vida social.
Un día sale de su pequeño caparazón y decide entrar en una web de citas para conocer a alguien. En ella conoce a una tal Irina, que como no y por su escasa inexperiencia con el sexo opuesto, se enamora de ella perdidamente y a pesar de la distancia su pasión lo devora. De tal manera que empieza a cambiar.
Cuando finalmente conoce en persona a la chica, marcada por una intrigante cicatriz en la mejilla, su mundo cambia para siempre y no precisamente por el amor. La joven oculta un oscuro pasado del que el propio Sax no podrá salir tras la muerte de su socio y la posibles sospechosas que recaen sobre él por parte de la policía.
Un debate moral entre su corazón y la verdad, se esconde conforme avanzas en la trama, pues la chica oculta cada vez más secretos que hacen dudar al joven de su amor y de todo lo que rodea a la muerte de su amigo.
Intriga hasta los topes, pero no con ese ritmo acelerado y cardiaco que nos propuso con «El paciente». Menos mal, porque casi me da un ataque con esa historia. Novela sagaz, sencilla, directa para entrar en las venas del lector y dejarse llevar durante horas en un trama perfectamente hilada y cuya formula sigue enganchando sin remedio con esos capítulos cortos que te hacen seguir devorando las páginas como si fueras un ser hambriento en pleno desierto.
Los personajes están muy bien estructurados, y personalmente Simon me da una pena que te cagas por lo tolai que es. Nunca os fieis de un escritor y mucho menos del rey del thriller de este país. Juan Gómez Jurado es difícil de igualar y desde hace unos años para acá, su fórmula de la Coca-Cola es la envidia de propios y extraños.
Gracias a Antonia Scott, descubrí su literatura y poco a poco me iré haciendo con toda su bibliografía para disfrutar de su ingenio, su sátira, sus diálogos mordaces y su capacidad para que nos quedemos ciegos de tanto leer sin parar.
Para mí, amante de la novela histórica y de terror, me es imposible pasar una año sin leer nada de mis dos escritores de cabecera: Stephen King y el hombre del que hoy os hablo. A unos meses del estreno de «Never» la nueva novela contemporánea del escritor gales más famoso, nos metemos de lleno en la saga de «Los pilares de la tierra». Esta vez con una precuela adaptada en la que es denominada como la «Era oscura», allá por el año 997, donde Inglaterra es asediada por dos flancos. Por un lado los galeses y por el otro los famosos vikingos.
Tras un asedio de estos últimos, Follett nos presenta al primero de los tres personajes que conformarán una trama apasionante. Edgar, un joven aprendiz y constructor de barcos y heredero de las artes que su padre le inculcó desde pequeño. El día que planea escapar con su amada del pueblo, el ataque de las fuerzas nórdicas ve truncado sus planes y su amada y su padre fallecen.
Toca huir al interior. Aquí es donde el autor nos va a introducir poco a poco como nace Kingsbridge y porque ese nombre (no os lo diré porque es muy bonito de descubrir). Allí, la vida de su madre, sus hermanos y sobre todo, la suya, cambia para siempre, pues conocen a los poderosos dueños de aquella comarca, una familia a la que «adoraremos» en demasía por la fenomenal capacidad que tiene Follett de crear a los villanos. En esta caso, una trinidad de hermanos donde destaca el despiadado y ambicioso obispo Wynstan y el que será en un futuro el marido de la siguiente protagonista, Ragna. Hija de un normando de alta posición en su país y aliado de esta familia y que poco a poco ira conociendo a Edgar y el resto os lo podéis imaginar.
En tercer lugar, tenemos a Aldred, un monje idealista y de moral inquebrantable (no como la sucia mente de Wynstan) que luchará por todos los medios de derrocar al poderoso obispo y sus tejemanejes para incluso intentar eliminar al rey. Aldred, en secreto, se enamora de Edgar y tratan juntos de deshacerse de una familia que es una plaga para todo el condado.
Poco a poco vamos viendo la evolución y crecimiento de cada uno de los personajes. La calidad, profesionalidad y determinación de Edgar. La perdida de la inocencia de Ragna (mi personaje favorito de la novela) por culpa de las miles de humillaciones a las que es sometida por su marido con amantes y con la ayuda de su suegra que es repugnante y sus hermanos, a cual más reptil). Wynstan descubre en ella a su más peligrosa adversaria y sus conspiraciones y luchas son apasionantes durante toda la historia.
No os quiero desvelar nada más. Solo deciros que esta novela la he disfrutado como un enano, al igual que la que sería su secuela, mi libro preferido «Los pilares de la tierra» y la segunda parte de esta «Un mundo sin fin». La secuela de toda esta saga dejó mucho que desear en mi opinión, «Una columna de fuego» llegó a ser por momentos aburrida y tediosa con tanta documentación. No por ello quiero decir que «Las tinieblas y el alba» no se caracterice por esta habitual premisa del escritor, pero si es verdad que todo se basa mucho más en la historia y evolución de los personajes y la capacidad de fundirlos con una época increíble. En conclusión, un cóctel medieval lleno de todo a lo que nos tiene acostumbrado el escritor: actos de odio, luchas de poder, venganza, ambiciones desmedidas, egoísmo, envidias, muerte y todo alrededor siempre de ese halo de esperanza que nos otorga el amor y lo que ello conlleva.
¿Pequeñas decepciones o fallos? El principal lo dije en mi reseña en mi canal de Youtube, el parecido en los nombres de todos los personajes malos y ya, como algo personal, que los vikingos no formaran parte de la historia, que solo estuvieran de forma testimonial en partes concretas.
Por lo demás, que es una novela altamente recomendable. Que la vais a disfrutar mucho y que en este casi no sobra ninguna de las casi mil páginas que contiene y que el autor tardó tres años en escribir.
Yo por mi parte, me muerdo las uñas esperando su nueva novela «Never» y me conformaré de aquí al 9 de noviembre con otra de sus publicaciones que compré hace poco «El tercer gemelo».
Mi puntuación es de 8,5 sobre 10.
Os dejo por aquí el enlace de mi reseña en YouTube, por si os gusta verme mejor jiji y que me regaléis un amoroso Like. Muchísimas gracias.
Al cerrar la tapa dura de «Rey blanco» tuve claro dos cosas. Primero, definitivamente Juan Gómez Jurado es el rey del thriller de este país y segundo, tenía que leer de una vez el inicio de esta trama empezada en 2014 y que yo inicie por error y desconocimiento con Reina Roja.
El equivoco no fue tan grave, pues ya me advirtieron que este libro del que hoy os voy a hablar no era la primera historia de ese maravilloso personaje al que todos amamos llamado Antonia Scott. Sin embargo, nos trae la primera aparición en escena del HIJO DE PUTA más grande que ha parido un escritor llamado Señor White, el archienemigo de nuestra querida e inteligente Reina roja.
¿Qué nos propone el escritor madrileño en esta historia? Imagina que eres uno de los mejores neurocirujanos del mundo y te proponen operar a alguien muy especial, el presidente de los estados unidos. Hasta aquí todo genial pero, ¿qué harías si te amenazan con matar a tu hija si no acabas con la vida del hombre más poderoso del mundo?
David Evans, nuestro médico estrella protagonista sigue refugiándose en su trabajo tras la muerte de su mujer y apenas pasa por casa. Eso le sirve a White, un sociópata sin rastro alguno de humanidad que se encarga de aceptar trabajos imposibles, para manipular a Evans tras el secuestro de su hija Julia. No os confundáis, White no es un sicario al uso, todo su trabajo se basa en un método. Un plan de conocimiento y control exhaustivo de su víctima que le hace jugar con él en todo momento. Y por supuesto, a nosotros como lectores, nos atrapa y hace vibrar durante toda la novela con un ritmo frenético en el que el doctor lucha contrarreloj para salvar a su hija y al presidente.
La sucesión de acontecimientos durante la trama se agudiza con la entrada en escena de una personaje al que personalmente le he cogido una cariño muy especial, Kate Bronson, hermana de Rachel (la desaparecida mujer de Evans), que para mas inri es agente secreto y parte del equipo de seguridad del presidente americano. Vive enamorada de su cuñado desde el primer día que los tres se conocieron y su dolor es el mayor de todos en esta historia cuando Dave le hace participe de todo lo que está pasando. Un amor imposible, la muerte de su hermana, el secuestro de su sobrina y su dilema moral y profesional con el posible atentado del presidente por parte de su cuñado, casi nada.
La ambientación es exquisita. Los personajes están muy bien desarrollados, incluso White, aunque este tenga su propio minilibro donde se le conoce un poco más en profundidad. Los secundarios también son importantes para el desarrollo de la historia y algunos, como el antiguo jefe de Evans, dignos de ser matado a pellizcos. Si todo esto lo enmarcas en un tiempo reducido de 63 horas antes de la transcendente operación, consigues atrapar al lector en una vorágine de situaciones extremas en la que no puedes dejar de leer.
Cabe destacar la profunda investigación y documentación por parte del autor para no dejar coja, sobre todo, la parte que rodea el mundo de la medicina y en este caso, la neurocirugía. Profundizando lo justo, sin recargar de información al lector y dándole los materiales necesarios para que su imaginación hagan el resto y no se desconecte de la trepidante aventura de nuestro protagonista.
El haberlo leído en ocho días os puede ayudar para entender lo que significa para un gamer como yo el haber dado prioridad a «El paciente» que al videojuego Spiderman de Miles Morales, je, je, je. Me he divertido muchísimo y no he sudado durante la lectura por culpa de Filomena, pero os puedo asegurar que por momentos lo he pasado fatal al ponerme en la piel del doctor y su cuñada.
El final es apoteósico, lleno de épica y heroicidad por parte de los protagonistas y con un cierre digno. He aquí mi única pega contra mi mismo, pues no ha sido sorpresivo al haber leído anteriormente la saga de Antonia Scott. Aun así, lo he disfrutado como un gordo seboso viendo una lucha de barro por la televisión entre dos mujeres.
Los reyes magos me han traído Cicatriz y mientras os escribo estas palabras, lo tengo a mi lado tentándome a finalizar esta reseña para hincarle el diente. Muchos me dicen que es el mejor de todos. Pronto os daré mi opinión y conociendo a Juan, no tardaré mucho.
Enhorabuena, de nuevo, Juan Gómez Jurado. Eres uno de mis referentes en el mundo de la escritura y aprender de ti es todo un lujo.